Especialista en psicología analiza el comportamiento de las personas ante el COVID-19
Ante los nuevos casos sin nexo de las pruebas realizadas por el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBS), la profesional en psicología y psicoterapeuta María de Lourdes Aquino explica el comportamiento de las personas ante el COVID-19, según su experiencia.
La profesional aclaro que para entender el comportamiento social de las personas lo primero que hay que saber es que el ser humano por naturaleza es un ser biopsicosocial. Esto implica que en su dimensión social es esencialmente un ser con los demás. Para bien o para mal se desarrolla en la interacción con otros.
“La principal y primera fuente de adquisición del comportamiento social es la imitación, hacer lo que otros hacen da una suerte de respaldo y seguridad social. Es algo básico, no ser excluido o perseguido. Uno de los principales temores es ser abandonado, excluido o perseguido, debido justamente a que se entiende que por naturaleza es difícil sobrevivir solo. Tanto es así que pareciera no existir la perspectiva de elegir con quien quiero estar o dónde quiero pertenecer” mencionó la Lic. María de Lourdes.
Además destacó que “sería diferente el comportamiento si en lugar de moverse por el miedo, uno se moviera por decisión y eligiera a qué grupo quiere pertenecer y a cuál no. ¿Cuál es la diferencia entre uno y otro?, para la psicología está en sentirse competente y seguro de sí mismo, ¿cómo se logra esto? con una educación basada en el reforzamiento de las conductas positivas y menos en el castigo y enfoque de lo negativo. Enfocarse solo en lo malo o negativo, dejando de lado conductas positivas, disminuye el sentido de competencia y la valoración de uno mismo”.
En base a la explicación sobre la teoría del comportamiento de las personas la Dra. María de Lourdes Aquino responde a las siguientes preguntas según su opinión profesional.
¿Cuáles serían las razones por las que algunas personas no obedecen las medidas de bioseguridad recomendadas?
Me animo a afirmar que el factor más importante es el grado de responsabilidad y consciencia de uno mismo en relación con los demás. El adulto funcional y bien adaptado, entiende que es responsable de sí mismo, de sus actos, pensamientos y emociones. El adulto inmaduro, se comporta muchas veces como un adolescente en desarrollo. Por un lado, sus emociones se orientan en mayor medida en sus necesidades particulares y son estas emociones las que abarcan en gran medida el contenido de sus pensamientos, por lo que sus actos, a veces pueden ser egoístas. Y hay otra gran característica del adolescente en desarrollo, es el pensamiento mágico de “a mí no me va a pasar”. En el pensamiento mágico se construye una suerte de blindaje para uno, para el adolescente, muchas veces son los padres, haciendo una similitud entre las autoridades paternas y del estado, pareciera ser que el estado, los ministros, los agentes de policías, médicos, representaran esa figura protectora o de resguardo. Por lo que si hay alguien que me “controla” yo cumplo, pero si no hay nadie que me vigile, yo puedo hacer lo que me resulta más cómodo o fácil o conocido.
¿Por qué cree que solo bajo vigilancia algunas personas se comportan bien?
Por temor al castigo. Esto es básico, pero explica muy bien por qué muchas conductas indeseadas se repiten. En una sociedad donde el castigo no es igualitario sobran las impunidades. Y cuanto más sea la impunidad mayor es el resentimiento. Este resentimiento no ayuda a crear y fortalecer una conciencia colectiva o un grado de responsabilidad social en el que un adulto se hace responsable de sí mismo para colaborar con los otros.
Incorporar nuevos hábitos, salir de la zona de confort, o cuidarse constantemente de no caer en la inercia de los viejos hábitos, puede ser abrumador para mucha gente.
A muchos les cuesta dimensionar los riesgos y alcance de los mismos y pensar en eso también le resulta abrumador. Las personas con baja tolerancia a la frustración prefieren seguir lo que es fácil o cómodo. Tienen la tendencia de enfocarse en sus emociones y no en la búsqueda de soluciones, por lo que recurren más veces a dejarlo al azar, al estado, los agentes policiales, mis jefes, mis docentes, los médicos, alguna autoridad que le marque lo que debe o no hacer y así reduce su nivel de estrés.
¿Cuál sería la solución a esto?
Enfocarse en lo que se hace bien, repetir una y otra vez de suerte a normalizar estas conductas de prevención de riesgo y la persona aunque sea por imitación, termine cediendo a lo que todo el mundo hace, para no ser diferente o ser excluido o rechazado. En esto la manera en que se enfoca las noticias puede ayudar bastante a modelar las conductas a seguir y reforzando lo que está bien hecho.
¿Cuáles serían las razones de escaparse de un albergue de aislamiento, considerando la importancia de la cuarentena?
Se comenzó analizando la conducta social y justamente la socialización es el proceso por el cual se incorporan las reglas, normas y pautas de convivencia. Se dice conducta antisocial de aquella que no muestra un respeto a las normas, reglas o pautas de convivencia, ya sea porque se consideran superior a los demás o porque considera que las reglas o normas son para los menos vivos o tontos. En lo que va de la cuarentena los casos más sonados de ruptura de la cuarentena obligatoria, como de los que estaban en albergues, o volvieron de viajes del exterior o cruzaron la frontera, en muchos aspectos responden bien a estas características. La conducta humana es sumamente compleja y existen muchos factores que influyen en ella. En algunos casos se mencionó consumo de sustancias, adicciones y otras formas de conductas delictivas, propias de las personas con rasgos antisociales.
De acuerdo a las características culturales de nuestra población ¿De qué forma o formas sería más efectiva despertar la conciencia de estar en aislamiento preventivo?
Las características culturales, pareciera indicar que responde más eficientemente a medidas restrictivas o de represión. Sin embargo esas medidas tienen un impedimento como toda educación basada en el castigo o la reprimenda, disminuyen enormemente el sentido de competencia y, por lo tanto, también disminuye el grado de responsabilidad individual y social.
Para desarrollar el pensamiento que ayuda las conductas de prevención se debe tener un buen concepto del futuro. Prevenir es asumir la responsabilidad y un grado de control sobre algo que no se sabe si va a pasar, pero que se entiende que es mejor si no sucede. Aquí entran en juego la emoción que despierta lo incierto y el estrés que genera adquirir e incorporar hábitos nuevos.
Desde la psicología, se puede afirmar que mostrar una y mil veces lo que se debe hacer y felicitar al que lo hace bien, trae dos beneficios aumenta el sentido de competencia del felicitado y ayuda a imitar al que está cerca.
Esto podría resultar muy bien con las personas con un buen grado de socialización, para aquellas personas que no tienen incorporadas las reglas y pautas de convivencia se debería actuar desde la ley o ámbitos judiciales de forma pareja para sentar precedente de que las conductas peligrosas son sancionadas y las conductas preventivas son premiadas. Esto podría ayudar bastante a discriminar con claridad una conducta de otra y por lo tanto ayudaría a desarrollar conciencia de los hábitos preventivos.
¿Qué factores son los que más reconocen la población como puestos en peligro ante esta cuarentena?
Se reconocen de manera más inmediata los factores que hacen al ámbito económico, porque genera un dilema entre un peligro presente y perceptible de manera concreta al no tener como satisfacer las necesidades básicas y por otro lado un peligro difuso y abstracto. Ese dilema pone en perspectiva todo lo demás. Es el punto central para muchas familias.
El otro ámbito en el que se resiente más la cuarentena es en el ámbito educativo, por numerosas razones, pero el principal es quizás, que muestra que la mayoría de los padres no saben qué hacer con los hijos. Así como esta coyuntura también permite emerger muchas necesidades que no pueden satisfacer y genera mucha o quizás demasiada frustración.
Tampoco puede negarse la cantidad de familias disfuncionales, en las que la convivencia prolongada y forzada cuando mínimo no es fácil y en muchos casos peligrosa.
Otro factor muy estresante es la llamada enfermedad de base, en la población paraguaya son elevados los porcentajes de estas dolencias, lo cual afecta mucho a las personas y ven su futuro de manera fatalista y lo cual es totalmente contraproducente.
Cree usted que ¿si el gobierno vuelve a decretar aislamiento total la gente respetará el tema del aislamiento social como prevención?
Ante este planteamiento surge la pregunta de hasta cuándo? Y esa respuesta no se sabe ni aquí, ni en ninguna otra parte del mundo. Se tiene estimaciones, pero ninguna certeza. Y las restricciones totales tienden a perder su fuerza más tarde o más temprano, y comienzan a buscarse maneras de quebrantar el control. En esto de hecha la ley, hecha la trampa, en Paraguay como muchos otros países con historia de autoritarismo, se tiene abundante evidencia de la creatividad sin límites de las personas. Sin contar que no contribuye a desarrollar la responsabilidad individual o social.
El tipo de cuarentena total, cumplió con el tiempo que las personas pueden respetar y acatar, aunque sea parcialmente un aislamiento social. Pero por sobre todo dio tiempo a ver una y mil veces cuales son las conductas preventivas que mejor funcionan hasta el momento. Ahora es tiempo de dar espacio y tiempo para poner en práctica esas conductas. Claro que esto lleva el gran riesgo de que no se cumplan, Ante esto se deberá hacer ajustes y quizás rectificaciones. Lo importante es comunicar adecuadamente las razones y apelar siempre en todo momento a la responsabilidad individual y social.
¿Qué puede sugerir al equipo de Área Social del Comité Científico del CONACYT para contribuir al mejoramiento del comportamiento de las personas?
Las conductas que se mantienen por largo tiempo son aquellas que resultan significativas y responden a fortalecer la imagen de uno mismo y de sus modelos. Buscar y generar espacios donde se dé un destaque a comportamientos razonables y edificantes, pueden ofrecer un modelo al que la mayoría quiera identificarse. Conductas de cómo los padres cuidan a sus hijos y los educa para cuidarse ellos, de hijos y nietos que cuidan y protegen a sus adultos mayores, conductas y protocolos de empresas que cuidan a sus colaboradores, etc. Pueden tener un efecto modelador de comportamientos preventivos a nivel social mucho más efectivos que sólo aquellos que muestran lo que no se hace o se hace mal. La mejor manera de revertir el efecto de lo irracional es modelando lo racional.
La entrevista fue realizada por el equipo Área Social del Comité Científico para la contingencia contra el COVID-19 del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT).